Con la llegada del frio vemos como van surgiendo distintas expediciones que quieren enfrentarse a uno de los retos más extremos que hay: el alpinismo invernal.
Con ellas, además de las clásicas discusiones sobre estilo, habrá quien se sorprenda al oír hablar de las distintas concepciones del invierno. Y es que a todos nos han enseñado desde pequeños en el colegio que el invierno comienza con el solsticio de invierno y acaba con el equinoccio de primavera. Sin embargo, no todas las culturas coinciden en este planteamiento basado en la astronomía.
El invierno astronómico
En la cultura occidental las estaciones comienzan con los solsticios (verano e invierno) y los equinoccios (otoño y primavera). Estos fenómenos son variables de año en año, pero en el caso del invierno del hemisferio norte, ocurren en torno al 21 de diciembre y 21 de marzo.
Este calendario es el que culturalmente adopta Europa y con el que los pioneros del himalayismo invernal -los polacos- se lanzaron a la conquista de las grandes cumbres. Por eso no es de extrañar que inauguraran la década de los 80 con la primera cima invernal del Everest y la cerraran en el 88 con la del Lhotse.
En total escalarían siete montañas de ochomil metros en invierno durante esa década, alcanzando todas las cimas entre el 31 de diciembre y el 17 de febrero. En su concepción, negarían la primera invernal al Dhaulagiri a Koizumi y Wangchu Sherpa que llegaron a la cumbre el 13 de diciembre de 1982, ya que aún no habría comenzado el invierno.
Sin embargo, esto chocaría con la concepción de invierno que tienen los países del este y que coincide con los permisos administrativos en el Himalaya. Estos consideran el invierno con criterios meteorológicos y cubre la totalidad de los meses de diciembre, enero y febrero.
El invierno meteorológico
En meteorología el invierno lo conforman los meses más fríos (diciembre, enero y febrero en el hemisferio norte). Durante diciembre el número de horas de luz se va acortando hasta llegar al solsticio de invierno – que es el día del año en que menos horas de luz hay-.
A partir de entonces el día se va alargando y, aunque los días más fríos tarden aún unas semanas en llegar debido a la inercia térmica, se produce un punto de inflexión.
Efectivamente, si analizamos los datos recogidos en Namche Bazaar (población cercana al Everest) vemos que el invierno meteorológico es más frío y tiene de media 1:26 horas menos de luz al día.
Al igual que ocurrió con los polacos, los países del este como Rusia o Japón tenían su concepción invernal, solo que en este caso basada en el calendario meteorológico. Por tanto, para ellos culturalmente todo diciembre es invierno y bajo esa premisa realizaron sus ascensiones invernales -sin esperar al 21 de diciembre-. Como ejemplos, la citada al Dhaulagiri japonesa o la ascensión kazaja al Manaslu -que se produjo un 8 de diciembre de 1995-.
A todo esto hay que sumar el hecho de que paises como Nepal tengan un calendario totalmente diferente que contempla 6 estaciones -donde influyen los monzones-. Por eso administrativamente dan permisos invernales en diciembre, lo que coincide con el plantemiento meteorológico.
Purismo invernal
A estas dos concepciones, que ya de por si han traído varias disputas, hay que sumar una posición defendida fundamentalmente por Simone Moro, pero con la que coincide una buena parte de la comunidad alpina y es el de la expedición puramente invernal.
En opinión de Moro, una expedición solo se puede considerar puramente invernal si acaba y comienza en invierno. Es decir, si una expedición comienza en otoño, hacen todo el trabajo en otoño, pero la cima la hacen en invierno, pese a ser una cima invernal, no debe considerarse como expedición invernal.
Esta concepción purista es la que motiva por ejemplo su próxima expedición con Alex Txikón al Manaslu. Y es que aunque ya se subió el 12 de enero de 1984, una buena parte de la expedición se produjo durante los primeros días de diciembre, habiendo equipado hasta el C-3 antes del 21 -inicio del invierno astronómico-. Lo mismo ocurriría con el Lhotse, Kangchenjunga o Dhaulagiri.
Polémicas por las fechas
Esta diferencia de conceptos ha originado un buen número de disputas entre diferentes alpinistas. La primera probablemente fue la ya referida que negaba la primera al Dhaulagiri invernal a la expedición japonesa, pero la más sonada fue la de Moro con Lafaille.
Ambos alpinistas coincidieron en el Shisha Pangma invernal en la temporada de 2004-2005. Lafaille que llegó a la montaña el 14 de noviembre alcanzó la cima el 11 de diciembre. Moro junto con Morawski comenzaron a trabajar, dentro de su concepción invernal, el 24 de diciembre llegando a la cima el 14 de enero.
Pese a que mayoritariamente se aceptó la de Moro y Morawski como primera, Lafaille -que realizó una ascensión asombrosa, en solitario y por una nueva variante- junto con buena parte de la comunidad alpina del este, nunca lo aceptaron.
Lafaille defendía que su permiso oficial era invernal y que las condiciones en las que escaló -las horas de luz y la temperatura- hacían que su escalada fuera propiamente invernal. Además justificaba que aunque en Europa se tenga otra concepción, hay que adaptarse a los calendarios del lugar donde se realiza la actividad.
Otro defensor del calendario meteorológico es Denis Urubko. Su concepción de invierno le llevó a realizar un intento en solitario en la expedición al K2 invernal en 2018 rompiendo la disciplina. Y es que aunque los polacos contemplaban el inicio de marzo como invierno, para Urubko la estación fría finalizaba con febrero.
Quizá el caso más peliagudo -por lo estricto- sea el primer y único ascenso invernal sin oxígeno al Everest efectuado por Ang Rita. Su expedición comenzó a trabajar el 30 de noviembre, llegando a la cima el 22 de diciembre de 1987 con la mala fortuna de que ese año el solsticio se produjo poco más de una hora mas tarde de que alcanzasen la cima. Esto hace que recientemente alpinistas como Txikón o Kobusch acudan al Everest reivindicando la primera invernal sin oxígeno.
Estado actual
Aunque la discusión continúa, parece que la comunidad alpina ha encontrado un consenso para evitar estas disputas y consiste en realizar la actividad en los meses que ambas concepciones coinciden que es el invierno: de 21 de diciembre al 28 de febrero.
Respecto a la historia, Moro habla de revisionar las ascensiones pero sin negar su status. «Esta ascensión no es para cancelar o destruir la primera invernal de los polacos, sino una revisión con un estilo actual.«
A este respecto se ha referido Wielicki, que lo engloba dentro del estilo sin perjuicio de las anteriores. Más tajante se muestra Urubko, que niega como invernales las polacas al Gasherbrum I y Broad Peak, al realizarse a principios de Marzo.
Clasificación de las primeras ascensiones invernales a los ochomiles
P: PURAMENTE INVERNAL (INICIO Y FIN DURANTE EL INVIERNO)
MONTAÑA | ALPINISTAS | INICIO | CIMA | ASTRON. | METEOR. |
---|---|---|---|---|---|
EVEREST | Cichy, Wielicki (oxi) | 31/12/1979 | 17/02/1980 | P | P |
Ang Rita | 30/11/1987 | 22/12/1987 | X | ||
KANGCHENJUNGA | Kukuczka, Wielicki | 09/12/1985 | 11/01/1986 | X | P |
LHOTSE | Wielicki | 10/11/1988 | 31/12/1988 | X | X |
MAKALU | Moro, Urubko | 20/01/2009 | 09/02/2009 | P | P |
CHO OYU | Berbeka, Pawlikowski | 30/12/1984 | 12/02/1985 | P | P |
DHAULAGIRI | Koizum, Wangchu Sherpa (oxi) | 01/11/1982 | 13/12/1982 | X | |
Kukuzcka, Czok | 04/12/1985 | 21/01/1986 | X | P | |
MANASLU | Berbeka, Gajewski | 02/12/1983 | 12/01/1984 | X | P |
NANGA PARBAT | Txikón, Moro, Sadpara | 31/12/20115 | 26/02/2016 | P | P |
ANNAPURNA | Kukuczka, Hajzer | 18/01/1987 | 03/02/1987 | P | P |
GASHERBRUM I | Bielecki, Golab | 21/01/2012 | 09/03/2012 | P | |
BROAD PEAK | Berbeka, Bielecki, Malek, Kowalski | 23/01/2013 | 05/03/2013 | P | |
GASHERBRUM II | Moro, Urubko, Richards | 10/01/2011 | 02/02/2011 | P | P |
SHISHA PANGMA | Lafaille | 14/11/2004 | 11/12/2004 | X | |
Moro, Morawski | 24/12/2004 | 14/01/2004 | P | P |
TODAS SALVO EVEREST SIN OXÍGENO
1 comentario
Jacobo · 1 diciembre 2020 a las 11:57 pm
Hola Aitor,
Muy bueno el artículo. En estos tiempos que corren que se mide todo al milímetro, has despejado las dudas y has dejado totalmente claro lo que es una ascensión invernal.
Un saludo!!